¿Habéis
visto Notting Hill? Supongo que no todos. Bueno pues hoy mi hija pequeña me ha
recordado un poco al personaje de la hermana del protagonista, que interpreta
Emma Chambers.
Para
quien no la haya visto, es una chica londinense un poco extravagante. Aquí os
dejo una foto de ella.
Bueno
pues mi hija cuando llega a casa se cambia de ropa. La ropa que yo le pongo
para el cole no es lo suficientemente moderna para ella.
Hoy ha
venido a mí con sus pantalones quitados, sus botas de agua de flores, su
diadema rosa con un velo semi arrancado que se supone que va hacia atrás, pero
que ahora mismo, lo lleva hacia un lado. Y por supuesto, su camiseta favorita,
de una de sus ídolos. De la princesa Sofía.
Porque
sí, porque mi hija que va a cumplir tres años en unos meses ya sabe lo que
quiere, y es fan, pero que muy fan de la princesa Sofía, de Pepa Pig y de Dora
la Exploradora. Son chicas actuales que mueven montañas. Son ídolos de masas. Y
mi hija como buena seguidora tiene sus pequeñas cosas de un fan incondicional.
Entre ellas camisetas. Rosas por supuesto.
Porque
señores, olvídense de eso de que a las niñas no hay que hablarles de princesas,
de que somos las madres las que les metemos el maquillaje y el rosa a la
fuerza. Porque no es así. A mi hija mayor el rosa, no le hace mucha gracia, y
sin embargo, mi pequeña, el primer color que se aprendió fue el rosa, ni el
amarillo, ni el azul ni el rojo. El rosa. Y de ese color lo quiere todo.
Ella
empieza a elegirme la ropa, no quiere pantalones ni en pintura, y cuando le pongo vestidos se pone a
gritar por la casa loca de contenta porque va a llevar vestidos de princesas.
Ella
tiene su propio estilo. En mitad de agosto me aparece con la bufanda y el gorro
de lana puestos, mientras me trae los guantes para que se los ponga. Todo ello
aderezado con sus gafas de sol rosas y algún vestido princesil que haya
encontrado. Porque la verdad, es que no sé cómo lo hacen, pero lo encuentran
todo.
Los
pintauñas escondidos los encontraron el otro día, y mi peque se pintó los dedos
azules, sí azules, que por mucho que restriego con la acetona, eso no se va ni
en pintura. Los tacones que tengo guardados en el fondo de mi armario también
los encuentran. Y van con el toc toc toc por toda la casa. Mis vecinos tienen
que estar contentísimos.
Y les digo
a todas esas personas que me dicen que no hay que ser sexista con los niños, y
que todo eso lo aprenden del ejemplo. Les diré, que yo jamás me pinto las uñas,
es más, me las como, sí un defecto feo que tengo que corregir todos los unos de
enero. No me maquillo, a no ser que vaya a una fiesta o evento importante, a
las fiestas de niños nunca. No llevo tacones, ni a diario, y en las bodas me
busco cualquier ardid para no tener que llevarlos.
En fin,
que mis hijas no aprenderán de mí todo este tipo de cosas. Es algo que llevan
dentro. Aunque la mayor no es como la pequeña, a ella le encanta maquillarse, y
ponerse tacones, pero prefiere cazar bichos, jugar con la pelota, y en el cole
se rodea de niños para jugar.
La
peque juega con los bebés, que hasta que nació estaban abandonados en la cesta
de los juguetes.
Y es
que mi pequeña de menos de tres años ya tiene su propia personalidad, y nos la
enseña todas las veces que puede. Ella tiene su propio estilo. Y a mí me encanta.
Un escrito ágil y lleno de emoción. Me ha encantado. Te leo a diario porque me gusta mucho tu forma de expresarte.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu apoyo. Me encanta que te guste mi forma de escribir. Un besillo.
EliminarEso te ocurre por ser la mala madre que eres como nos comentabas en otro post que llevaba precisamente ese título. ¿Lo ves lo que ocurre? que después cada una sale de su padre y de su madre.....(Todo esto de broma ¿Eh?)
ResponderEliminarEl ejemplo es importante en lo que se refiere a las formas y la educación, lo que les enseñas y ven hasta los 10 años, es lo que principalmente va a cuajar en ellos.
Pero en lo referente al vestido, la música y sus ídolos es algo que van recogiendo en afanosa cosecha a lo largo de sus años más "conflictivos" de la televisión, de los compis de clase y toda la montaña de información de la que ellos se van empapando como bob esponjas.
Divertida tu realidad cotidiana con la que todos los padres comprometidos bregan a diario y que aunque nos parezca mentira, muchos envidiarían a pesar de los pesares.
¡Yo me apunto! y lo del rosa y los lazos y las muñecas; sin ser sexistas, creo que algo tendrán que ver las hormonas y los genes, ¡sino de que!
Besos para ti y tus adorables princesas.
Jajajaja me has hecho reír. Claro qeu soy una mala madre, lo digo y me reafirmo en ello. Y como tú dices, ahora me encuentro con estas loquillas que viven la vida a su manera.
EliminarYo creo que lo del rosa, las muñecas y demás es porque la cabra tira al monte. Y aunque no todas las niñas ni todos los niños son iguales, es verdad que algo les llama la atención. Y no por eso se es más sexista, machista, feminista, o lo que quieran que sea. Qe siempre hay que ponerle etiquetas a todo.
Mira como me enrollo, jajaja. La verdad es que sí etoy divertida. Veremos a ver cuando sean adolescentes, eso será otro cantar.
Un besillo muy grande y gracias por hacerme reír. Sé que era broma.
¡¡¡Aaaaaaaaiiiixxxx!! ¡¡María!!
ResponderEliminar¡¡Que monis tus Peques!! *-*
La verdad es que, aunque sí que es cierto (o al menos desde mi punto de vista) que en muchas ocasiones se diferencian gustos y juguetes por sexos, hay Pequeñajos que tienen las ideas muuuuy claras desde el primer momento. Y eso me encanta. Porque se nota que van a tener una Personalidad Arrolladora, de esas que tanta faltan hacen. Aunque eso, también es desde mi punto de vista ;)
Debo confesar que, siendo una Cría, también era adicta al Rosa, a las Princesas, aunque a las Guerreras, y a los Caballeros del Zodiaco... Yo recuerdo jugar con las Barbies a Xena... Así que... ¡También fui a mi bola desde siempre! xDD
¡Me encanta lo Bichinas que son! ¡Qué Sonrisa me sacas! Imaginármelas trasteando por la casa, en busca de tesoros... ¡Pintauñas al poder! xDD
¡Tienes dos Peques con mucha Fuerza!
¡Mil Besines! ^w^
Sí que son unas bichuchas. Pero me lo paso pipa con ellas.
EliminarYo de pequeña jugaba a las playmobil, y nunca he jugado a las barbies ni a las mamás y papas. Cuando cogía una barbie de mi hermana era para cortarles el pelo. De pequeña quería ser peluquera.
Ahora mi hija meyor me recuerda a mí, y la peque a mi hermana, que era igual.
Pintauñas al poder, sí, jajaja ahora me río, pero cuando tengo que limpiarles esas manos...
Un besillo guapa. Me encanta sacarte una sonrisa.
Ay María no sabes lo que me ha gustado este post. Mi hija tiene 8 años y ahora está en la etapa de las Monsters High (con lo feas que son por Dios), y lo primero que hace cuando llega del cole es maquillarse ojos y labios, se maquilla mejor que yo la tía, y los tacones? Ufff contenta me tiene con el toc toc pero qué le vamos a hacer, es una niña y como tal hay que dejarlas que disfruten y hagan su propia personalidad!!
ResponderEliminarBesin ;)
Totalmente de a cuerdo. Me la imagino taconeando por la casa, jejeje. Estos niños nos adelantan en todo. Supongo que es así como se sentían nuestras madres. Un besillo.
EliminarQué mona... Mis sobrina mayor (ahora tiene 8) era igual, no podía tener nada que no fuera rosa. sus complementos, sus cositas, toooodo le gustaba rosa. Luego fue cambiando de criterio y ahora el rosa es una opción, pero no la única.
ResponderEliminarPor cierto, recuerdo perfectamente la película Nothing Hill. Al ver la foto de la chica me ha hecho gracia.
BEsitos.
Es que mi hija me recuerda un poco a ella. Es muy estrafalaia, lo mismo lleva bufanda en pleno agosto que chanclas en Navidad. Como ya he dicho, tiene su propia personalidad.
EliminarUn besillo.
Totalmente de acuerdo contigo, María. Los niños tienen sus propios gustos y su propia forma de ser desde bien pequeñitos. En mi casa éramos cuatro hermanas y cada una era por completo diferente a las otras, a pesar de tener iguales padres, igual educación y estar en el mismo colegio, Había para todos los gustos!! jajajaaaja.
ResponderEliminarTambién conozco el caso de dos mellizas diferentes como la noche y el día: una ha nacido para princesa de rosa y la otra para vaquero del oeste. No serán cosas de los padres, desde luego :)
Un post muy diver y tus hijas, para comérselas. Tienes que estar muy entretenida todo el día!!
Un besillo de miércoles.
Lo que me cuentas es toda una realidad. Lo bonito de loe hijos es que los ves desarrollarse de manera distinta. Ellos tienen cada uno su personalidad, y lo mejor es dejar que ellos mismos la desarrollen.
EliminarUn besillo.
Que recuerdos me has traído, no sólo de mi misma que andaba de niña hecha una princesa rosa, aunque no lo crean, no podía ver un pantalón y siempre elegía blusitas con la espalda de tiritas. Sino tambien me hiciste acordar a mi hija mayor que de pequeñita era igual a mi, todo de rosa y tules pero en la adolescencia cambio al metal, el negro y lo fúnebre. Si! Tengo una hija ya señorita y no es que sea muy mayor eh!! Es que comencé muy joven XD. Me encantó. Besos!!!
ResponderEliminarJajajaja ni te imagino. Seguramente serás toda una inspiración para tu niña.
EliminarUn besillo muy grande.
Qué bonita María una princesita. Si es que la personalidad nace innata en los niños y por lo que describes tu pequeña tiene mucha. Eso es súper bueno, que desde pequeñita ya sepa lo que le gusta y lo que no... luego cuando sea adolescente se lo recuerdas, jeje! Me recuerdan a mi hermana y a mi, ella era de chándales y yo de vestiditos.
ResponderEliminarUn beso.
Sí la verdad es que tiene una gran perspnalidad. Cuando sea adolescente le recordaré todas sus pequeñas cositas.
EliminarUn besillo.