7/9/15

Quiero ser pirata



                Yo soy cola, tú pegamento.

               Tú peleas como una vaca.

               Una vez tuve un perro más listo que tú.

               Quería ser pirata, estaba totalmente convencido de lo que quería era ser pirata. Y para ello solo tenía que llegar al final, salvar a mi amor y enfrentarme al temible pirata LeChuck.

               Mi madre me llama. ¡Qué pesada!

                - ¡Ahora voy!

                Sigo con mi aventura con el único afán de convertirme en el mejor pirata que han surcado los mares. Mi madre vuelve a insistir, así que a regañadientes le doy a guardar y voy. La comida ya está fría y mi madre tiene cara de enfado. Yo también, estaba atascado y necesitaba resolverlo. Como rápido y me siento de nuevo en busca de mis aventuras. Oigo a mi madre suspirar a lo lejos, me lo quito de la cabeza.

                Otra lucha de espadas, otro duelo a muerte con otro pirata. Lo salvo y sigo adelante. No encuentro lo que busco, pero no pierdo mi afán por encontrarlo. Podría mirar el truco en internet, en alguna página donde me digan que hacer ahora, pero quiero jugar sin trampas. Así seré un pirata de verdad.

                Mi madre me vuelve a llamar. ¿Ya está la cena? Pues sí que se ha pasado rápido.

                - ¡No tengo hambre!

                - ¡Deja ya el maldito juego y ven a cenar!

                - ¡Mamá déjame en paz! ¡Voy a ser un pirata de verdad!

                De repente, y sin darme cuenta, mi habitación desaparece, me miro las manos y ya no son de carne y hueso. Los pixeles invaden mi humanidad. Miro a mi alrededor. Veo la casa del gobernador y veo el Scumm Bar, la taberna pirata. Empiezo a moverme de un lado a otro, cuando un pirata se pone delante de mí con su espada. Quiere luchar conmigo. Y yo en vez de luchar, escapo en sentido contrario.

                Me estoy asustando, no sé qué hago aquí. Quiero irme con mi madre a cenar algo calentito. Otro pirata me espera, y yo saco mi espada. Espero acordarme de las respuestas. No sé si podré salir indemne de este duelo.

                -¡Llevarás mi espada como si fueras un pincho moruno!

                No podía elegir entre opciones, tenía que acordarme. Mi mente se quedó en blanco y no me salía la respuesta. El pánico me tenía completamente atemorizado. No podía salir de allí, una vez empezado el duelo, ya no había vuelta atrás o ganaba o perdía. El sudor perlaba mi frente y las palabras no llegaban a mi boca.

                Me desperté encima de las teclas de mi ordenador. El juego seguía en mi pantalla y la oscuridad de la noche me envolvía. Me había quedado dormido. Todo había sido un sueño, como en “Los Serrano”. Apagué el ordenador y me fui a la cama. No volvería a jugar durante una temporada.


24 comentarios:

  1. juegazo Maria, en mi lista de las mejores aventuras gráficas que he jugado, guybrush threepwood esta en mi top 5

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo qeu de todas a las que he jugado, también una de las mejores. La pena es que ahora no tenga tiempo de jugarlas, pero bueno, siempre estará en mi recuerdo. Un besillo.

      Eliminar
  2. Monkey Island es un joya que he descubierto no hace mucho. Por mi edad no lo conocía (tengo 26 años) y lo descubrí por un podcast. Me ha fascinado. Leyenda!!!
    Un saludo desde El Grifo de Sable +1

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo soy un poquito mayor que tú, y jugué desde el primero hasta el último. Muchas gracias por pasarte. UN abrazo.

      Eliminar
  3. Me encanta Monkey Island. Esto que has escrito refleja muy pero que muy bien mi realidad de hace.... mejor no contamos los años 😊

    El mejor duelo de "espadas" de la historia.

    ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajaja, sí mejor no contamos los años. A mi también me enganchó. Un abrazo y gracias por pasarte.

      Eliminar
  4. Una historia ingeniosa, me encantó, felicidades María.

    ResponderEliminar
  5. Qué chulo!!!! Yo soy muy ludópata, me engancho demasiado a los juegos así que hago como tu protagonista, dejo de jugar durante una temporada.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ayyy yo también lo era. Pero con niñas y con el Blog, poco tiempo tengo ahora para juegos. Jijiji. UN besillo.

      Eliminar
  6. Muy bueno, Personalmente no me engancho a los juegos, pero si he de reconocer que en ocasiones me pasa eso mismo con otras cosas.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Todos tenemos algo a lo que engancharnos y perder la noción del tiempo. Un besillo.

      Eliminar
  7. Hay que tener cuidado con lo que se desea, no siempre es tan fácil salirse como en un videojuego. Muy bueno María.
    Abrazo!!!

    ResponderEliminar
  8. Saludos, soy un amante de la época dorada de las aventuras gráficas de ordenador, y Monkey Island era una de ellas. Desde ese punto de vista ya tiene el microrrelato mi aprecio, y por lo demás, qué decirte, que sigues siendo constante y buena narradora. ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tus palabras. El Monkey es uno de los mejores juegos a los que he jugado, y con este relato, me dan ganas de volver a jugar. Un besillo.

      Eliminar
  9. Monkey island, que grande... Casi me haces llorar de nostalgia. Esta noche seguro que sueño con el mono de tres cabezas. Gracias por este regalo María.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajaja sí que fue uno de los juegos de mi juventud. No podía parar de jugar. Un besillo.

      Eliminar
  10. ¡¡¡Woooow!!! Me has hecho rememorar uno de los mejores videojuegos de la historia, una aventura gráfica alucinante de nuestra infancia. Gracias, María.
    ¡Abrazo, Hermana de Letras!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ayyy mi infancia quedaba atrás con este juego. Yo tenía unos pocos años más. Jajaja. Un besillo Hermano de Letras.

      Eliminar
  11. ¡Monkey Island, que grande! Al 1 no lo jugué demasiado pero el tres me marcó mucho a nivel artístico y visual. Cuidado con lo que deseamos, que como se convierta en realidad nos podemos hacer chaqueta, jeje. ; )

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo he jugado a todos, y me han encantado. Volvería a jugar si tuviera tiempo, pero mis enanas me lo impiden, jejeje.
      Un besillo.

      Eliminar

Deja tu huella. Me encantaría leerla.

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.