Día de la mujer, o no

      Ahora que estamos de resaca, que ya todo el mundo está atiborrado de frases sobre la mujer y dibujos eternos de flores y rosas para ellas, para nosotras. Hoy que ya todo el mundo se olvida de que seguimos aquí. Hoy yo quiero hablaros de ese día. El día de la mujer.

   Debo reconocer que ese día me produce sentimientos encontrados, y me explico. 

     Por un lado pienso, es bueno que se tenga un día de la mujer, que se recuerde el valor que tenemos en la sociedad, y las barbaries que aún se cometen en todas las partes del mundo por el hecho de ser mujer. Y digo en todas las partes del mundo porque, incluso en los países desarrollados se cometen atrocidades por ser el "sexo débil". No en la misma escala que en los países subdesarrollados, pero también sucede.

     En los países desarrollados estamos consideradas como personas, algo que no pasa en muchos de los países subdesarrollados. Pero somos tratadas como personas inferiores. Estamos constantemente argumentando todo lo que hacemos. Se oyen constantemente estudios sobre las universidades, carreras, donde las mujeres sacan mejores notas que los hombres, y esto se proclama a los cuatro vientos. ¿Por qué tenemos que justificarnos? Los sueldos y los puestos de trabajo, es un tema que mejor no hablar, porque existe diferencia siempre. 

      Y luego está la conciliación laboral. Para un hombre es más fácil la conciliación. Una mujer se queda embarazada y ya tiene algunos meses que tiene que dejar de trabajar, algo que no gusta a los jefes. Cuando te incorporas, hay veces que tienes que pedir reducción de jornada, otra cosa que a los jefes no les gusta. Tienen que contratar a otra persona para cubrir esas horas que tú no haces, con lo que tiene que dar otra alta en la seguridad social y más gastos. Después se ponen los niños malos y es otro problema. Porque generalmente es la mujer la que falta a su trabajo para quedarse con los niños. Así obligan a los padres a llevar a los niños malos al colegio. Por no poder faltar a sus puestos de trabajo. Con lo que ¿alguien me quiere explicar dónde está la conciliación laboral? ¿Y para quién es?

      Y luego tenemos las típicas cosas que aún tenemos que aguantar las mujeres por la calle, porque no sé si alguna ha tenido que aguantar que te sigan por la calle, o que te toque el culo un desconocido, o alguna ordinariez. 

     La discriminación en el lenguaje, la discriminación a la hora de vestir, a la hora de las relaciones con otras personas. En fin millones de cosas que aún quedan por lidiar y mejorar en esta sociedad nuestra. En esta sociedad donde a veces nosotras somos nuestras peores enemigas.

      Y no quiero hablar de lo que les hacen en otros países porque eso si que me cabrea de tal manera que puede que hunda las teclas de mi ordenador mientras lo escribo.

      Como decía al principio de mi entrada, este día me causa sentimientos encontrados. Por otro lado pienso que no necesitamos un día de la mujer. No deberíamos tener que atribuirnos un día para acordarnos de que estamos aquí. Que se debería tratar a todos por igual. Me da la sensación de ser un poco discriminatorio el tener que usar un día para acordarnos de que la mujer existe.

      Estamos constantemente comparando los dos sexos, el hombre es más fuerte, la mujer aguanta más el dolor (cuantas veces habré oído e incluso dicho, que si el hombre tuviera que parir, la sociedad se habría extinguido), los niños son más brutos, las niñas son más dulces (pues yo tengo dos niñas que a brutas podrían competir con cualquier niño). 

      En fin, que tenemos un día para acordarnos de nosotras mismas como mujeres, que nos adulen y que se acuerden de que existimos. Pero luego tenemos 364 donde las cosas vuelven a su cauce. Esperemos que ese cauce siga cambiando y se desvíe un poco del camino impuesto.