La doble cara de Google+

                Cuando yo me abrí mi Blog, no conocía para nada lo que era Google+. Jamás había entrado y cuando me habían hablado de él, tampoco presté mucha atención.

                Pero cuando abrí mi blog, por supuesto lo enlacé a Google+. Cada día aprendía cosas nuevas, y cada día cometía errores. Aún sigo aprendiendo y cometiendo deslices. Supongo que como se dice por ahí, de los errores se aprende.

                Aprendí lo que eran las Comunidades, y gracias a gente que me empezó a leer, pude encontrar algunas maravillosas, donde hay gente estupenda que me ha ayudado en mi camino.

                Poco a poco me he hecho dueña mi propio rinconcito, y ya me manejo un poquito mejor, eso sí, me sigo perdiendo en conceptos como SEO y cosas así. Pero ese es otro tema. Me pongo a divagar y no hablo de nada claro.

                Como iba diciendo, las Comunidades de Google+ las he visto siempre como una forma de dar a conocer mi trabajo y de conocer a otros escritores estupendos. Luego descubrí grandes sorpresas, ya que podía interactuar con los demás a través de retos y concursos que me proponían cada día un nuevo desafío. Eso también me gustó.

                Pero como en todas las redes sociales, no todo iba a ser bueno. En Google+ te relacionas con un montón de gente que ni siquiera conoces, gente que podría ser el de la foto o una cucaracha extraterrestre que viene del futuro para estudiar a la raza humana a través de las redes sociales.

                Y aquí nos encontramos con ciertas cosas sospechosas. En primer lugar, nos encontramos hablando a través de una máquina, no se ve a la persona cara a cara. Para mí, eso es un problema. Porque nunca se sabe a ciencia cierta que ha querido decir la persona que tenemos enfrente. Además está el valor añadido de no conocerla, que eso siempre es un plus.

                En segundo lugar nos encontramos con los halagos vacíos, sí señores, a lo mejor con este comentario me echo tierra sobre mi propio tejado. Porque la verdad es que dando críticas y valoraciones, soy un poco pésima. Pero a todos nos gusta saber que la persona que nos comenta, nos ha leído. A nadie nos ayuda los comentarios del tipo: “Muy bien”, o “Me encanta”,… Por lo menos a mí no.

                Si no quieres leerme no lo hagas, pero no me comentes para darte más presencia en la red.

                Y luego están los +1 dados a diestro y siniestro, porque yo lo valgo. Y es que yo no le doy a un +1 si no he leído el texto, y por supuesto si no me gusta. Nunca se sabe lo que puede haber detrás de un título sugerente. Así que espero que no les den a mis relatos un +1 porque sí, sino porque lo han leído y les ha gustado.

                Me gusta escribir, y con las redes sociales es más fácil darnos a conocer, que la gente nos lea y nos diga que es lo que le gusta y lo que no. Google+ nos ayuda a eso. Supongo que no todo el mundo tiene la misma visión de las cosas.